DIA DEL PADRE.
Oda, Poema, Revista, Comentario, Verso.
No
Joke. No Chiste.
En el
Día del Padre, en éstas Tierras. Y para todos los Padres, en su día.
(Ruego disculpar imprecisiones.
Agradezco captar la idea).
Hijo, cuando yo ya no pueda, el día que esté viejo, y
que ya no sea el mismo, ten paciencia y compréndeme.
Cuando derrame la comida sobre mi ropa, y olvide como
atarme los zapatos, recuerda las horas que pasé enseñándote esas cosas.
Si cuando converses conmigo, repito y repito siempre la
misma Historia que ya tú te sabes de sobra, por favor, no me interrumpas y
escúchame. Cuando tú eras pequeño, para que tú te quedaras tranquilo, o te
durmieras, debí contarte muchas veces el mismo cuento.
Si llego a hacerme mis necesidades físicas delante de
la gente, no me averguenzes delante de ellos, no tengo la culpa, es que ya no
me puedo controlar. Piensa en las veces que te ayudé en eso cuando eras niño, y
pacientemente.
No me reproches ni me regañes porque no me quiera bañar,
recuerda cuando te perseguía, y debía inventar algún pretexto, para que tú
pudieras hacerlo.
Acéptame y perdóname como estoy ahora, ya que ahora, el Niño soy yo.
Cuando me veas inútil e ignorante frente a todas las
cosas que tú sabes ahora, y que yo ya no las puedo entender muy bien ni con
facilidad, Te suplico que me des todo el tiempo que me sea necesario para eso,
y no me vayas a castigar con una sonrisa burlona, ni con un gesto de indiferencia,
ni con un gesto de superioridad.
Te presté todo el apoyo que necesitaste para tú educación
y el desenvolvimiento que hoy tienes, para que enfrentaras lo que hoy estás
viviendo, y que sé, que lo estás haciendo muy bien.
Y si me fallan las Piernas porque ya están cansadas,
dame por favor tu mano para apoyarme, como yo lo hice incansablemente para que tu
caminaras, con tus débiles piernitas y problemitas, para esos momentos.
No te sientas triste e Impotente por cómo me veo ahora,
por el aspecto que tengo, sólo dame tu corazón, considérame y compréndeme, de
la misma manera como siempre te acompañé, te amparé, y te apoyé, en tu sendero.
Por favor, acompáñame, y déjame terminar el mío.
Dame amor y paciencia, que yo te lo agradeceré, y podré
sonreír, como tú sabes que lo sé hacer, y como tu sabes, que a ti te gustaba, y que también sabemos, que le gustaba a la
gente, y con el mismo amor que sabes que siempre te he tenido, y que siempre te
tendré.
Y te lo juro hijo, no es que te lo esté cobrando, es que simplemente necesito de ti. Por favor, no me abandones.
Y te lo juro hijo, no es que te lo esté cobrando, es que simplemente necesito de ti. Por favor, no me abandones.
Piensa que con el paso que llevo adelante, el que estoy
dando ahora, lo que estoy haciendo, es que estoy construyendo con amor, la ruta para ti,
para el otro tiempo, para la otra vida.
Siempre te esperaré, y te ampararé, cuenta conmigo. Seguro.
AMED RONDON.
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